Estoy en una fase
entre lo vivo y lo inerte,
me dedico a quererte
y no me soporto.
Suspiro y sonrío cuando te recuerdo
como quinceañera,
como borracha empedernida.
Estoy en una fase exponencial,
en la que solo te amo y te amo,
escucho música cursi
y escribo poemas de triste amor.
Me divido y transmito la infección
de felicidad momentánea,
esperando el momento en que alguien diga algo y se arruine.
¿Cuanto tardará en llegar nuestra fase estacionaria?
En la que mi amor ya no crezca,
e incluso pueda reducirse
y dar paso a la fase de muerte.
Soy una espora, en animación suspendida.
El optimismo no es mi fuerte
el amor es mi motor,
pero soy tan pequeña,
y tu tan grande,
y no podemos llenarnos de amor.
Eres un hospedero resistente.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario