domingo, octubre 02, 2011

Bésame, Bésame

"Bésame, bésame" Te dije,
en algún lugar del barrio antiguo,
no hacía calor ni hacía frío,
y en mis labios estaba mi ruego,
"Bésame, lento, te lo pido"

"Luego, mujer, luego" Dijiste,
tomaste mi mano y caminaste,
seguí tu paso, firme y decidida,
no te iba a dejar largarte

Comenzó el sol a caer, no había lluvia,
el estómago me dolía como quien espera una tragedia,
y yo sabía, que de nuevo, yo era "ninguna".

Y en mis pesares busqué tus ojos,
oscuros, muchacho, como tu conciencia,
y liberados, hombre, como tu persona.

Y tu eres mi grillete, me aprisionas.

"Bésame, bésame" te dije
y me escondiste debajo de un puente,
te pusiste de pie, en frente,
sostuviste con tu mano, mi barbilla,
me dijiste que solo era una niña.
Y yo lloré y lloré.

Me abrazaste y me viste,
como un niño observa el jarrón roto,
y con el agua salada enmarcando mi boca,
besaste, tiernamente mis labios.

Y terminaste de matarme.

Me dijiste "Ahi está tu beso, mujer obstinada,
se vienen noches de mojar tu almohada"
Y yo te dije que no me importaba.

Pero importó.

1 comentario:

David Cotos dijo...

que rico que son los besos, y algo delicioso es recordarlos así como tú lo has hecho.